Esta semana recomendamos la última novela de John Grisham, el maestro del thriller legal, titulada «Un abogado rebelde», que edita Plaza & Janés.

El abogado rebelde es Sebastian Rudd, que no representa el perfil típico de un abogado, puesto que lleva pistola y tiene por oficina una camioneta a prueba de balas, conducida por un guardaespaldas que es, a su vez, su único amigo. Defiende a quienes otros no querrían ni ver: un drogadicto, un chico tatuado que supuestamente forma parte de una banda que rinde culto al Diablo y que está acusado de acosar y asesinar a dos menores, un criminal en el corredor de la muerte, o un hombre condenado por disparar contra dos policías.
¿Y por qué estos clientes?, pues porque Sebastian Rudd tiene la firme convicción de que todo el mundo tiene derecho a un juicio justo, aunque tenga que hacer trampas para conseguirlo.

Odia las injusticias, no le gustan las aseguradoras, los bancos o las grandes empresas, desconfía de cualquier persona que tenga que ver con el Gobierno y se ríe de las nociones del sistema judicial sobre comportamiento ético.

Sebastian Rudd es valiente, agudo y tenaz, además de rico en enemigos de toda índole.