Filmin estrena la primera película de la directora Lauren Hadaway, una de las grandes revelaciones del cine indie estadounidense, nominada a cinco premios en los Independent Spirit Awards.
Filmin estrena el próximo viernes 18 de marzo la película «La aspirante» («The Novice» en su versión original), ópera prima de la cineasta Lauren Hadaway merecedora de cinco nominaciones en los Independent Spirit Awards y gran triunfadora del Festival de Tribeca, donde se llevó los premios a la Mejor Película, Mejor Actriz y Mejor Fotografía.
Isabelle Furhman, la niña de «La huérfana» (Jaume Collet-Serra, 2009), protagoniza este descenso a los infiernos de la obsesión encarnando a Alex Dall, una joven que se siente atrapada por la adrenalina del deporte de alta competición y lo sacrifica todo, incluyendo su equilibrio físico y emocional, en tratar de ser la mejor remera de su universidad.
Sinopsis
Alex Dall (Isabelle Fuhrman) es una estudiante universitaria que se une al equipo de remo de su universidad, emprendiendo un viaje físico y psicológico obsesivo para ser la mejor en la mejor embarcación, sin importar el coste. Con la intención de superar a sus compañeros de equipo, Alex se esfuerza hasta más allá de sus límites, alejándose de todos los que la rodean en nombre del éxito.
Sobre la película
La directora Lauren Hadaway sabe perfectamente qué significa verse atrapada por la búsqueda obsesiva de la excelencia en el deporte. Ella misma fue remera en la universidad y confiesa que estuvo atrapada en la obcecación por ser cada vez mejor, por lograr cada vez mejores marcas y superarse a si misma. De su experiencia personal nace «La aspirante», una película-catársis que le ha permitido exorcizar algunos demonios de su etapa universitaria.
Para la directora era clave que en esta ocasión, y a diferencia de otras películas con las que se ha comparado «La aspirante», como «Whiplash» o «Cisne negro», la motivacion y el impulso interior fuesen los únicos motores que activaran el descenso a los infiernos de la protagonista. En todas las películas que he visto de este tipo había una fuerza externa: un entrenador, una madre exigente, unos Juegos Olímpicos en el horizonte… Yo quería explorar qué supone verse presionado por uno mismo y cómo el deporte propicia, y a veces respalda, la autoaniquilación, explica Hadaway.
«Whiplash» es una de las múltiples producciones que han contado con Hadaway en su equipo de sonido en los últimos años. Su experiencia y dominio se hacen evidentes al contemplar el ejercicio sensorial en el que se convierte la película gracias a su diseño sonoro, su montaje y toda su puesta en escena. El 99 por ciento del público no sabe nada sobre remo, y espero que la mayoría no hayan conocido jamás una obsesión como la que retrata el film, explica la directora: Entonces, ¿cómo colocas al público en la cabeza de la protagonista? Esa pregunta guió todas las decisiones que tomamos a nivel creativo. Hadaway reconoce que esta no es una película sutil, y puede causar rechazo a mucha gente, pero quería golpear en la cara al espectador.
Quien también probó «las mieles» del perfeccionismo extremo fue la actriz Isabella Fuhrman, que se sometió a un entrenamiento extremo con un único objetivo en mente: Tenía que presentarme el primer día de rodaje , sentarme en el bote con remeros reales y demostrar que no desentonaba. Para ello entrenó seis horas diarias en el agua y cuatro días a la semana junto a un entrenador. La actriz recuerda: Un domingo me desperté a las 4 de la mañana para ir a entrenar. Estaba hecha polvo, las ampollas de las manos me sangraban y recuerdo que cualquier cosa podría haber hecho que me rompiera. Estaba agotada en todas las formas posibles y recuerdo que pensé: «De acuerdo, este es el sentimiento que necesito para hacer frente a esta película y que esto funcione».
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Fuhrman firma una de las mejores interpretaciones del año, si no la mejor.
— ReelViews
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Combina un montaje y un sonido estelares para ofrecer un estudio de personaje vibrante.
— Mashable
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Algunas escenas transmiten humedad, como si el sudor de los personajes llegara a la pantalla […] una experiencia sensorial de pesadilla.
— The Hollywood Reporter
