Se proyectará el próximo jueves 13 de abril a las 19.00 horas en el Espacio La Granja
La primera cinta dirigida por una mujer en la historia de Hungría
Filmoteca Canaria presenta su nuevo ciclo de cine dedicado a la directora húngara Márta Mészáros, una persona comprometida en documentar los cambios de su sociedad a través de la mirada y los sentimientos de mujeres que no se dejan amedrentar por las circunstancias. La programación en Santa Cruz de Tenerife comenzará con ‘La muchacha’ (1968) el jueves 13 de abril en el Espacio La Granja. La proyección será las 19.00 horas, en versión original con subtítulos en español, con entradas en taquilla o en la web del espacio.
‘La muchacha’ fue la primera película realizada por una directora en Hungría, un filme de denuncia sobre cómo las sociedades contemporáneas ‘más libres y modernas’, reprimen a las mujeres de una forma sutil a través de una explotación económica y sexual. La cantante Kati Kovács, muy famosa en su época, protagoniza esta historia, que sigue a una joven, criada en un orfanato, que recibe una carta de su madre, lo que la llevará a emprender un viaje para dar con ella.
Sin embargo, el reencuentro no será como esperaba, su madre está casada y mantiene oculto el misterio de su existencia, por lo que la hace pasar como una sobrina lejana para no ser descubierta. Una situación que sumirá a la chica en la soledad y la hará involucrarse en todo tipo de relaciones poco satisfactorias, hasta que encuentra un hombre que parece saber algo sobre la muerte de su padre, pero, ¿le estará diciendo la verdad?
Mészáros es una de las pocas voces femeninas que se hicieron oír, con una cierta continuidad, dentro del prolífico panorama que nos ofrecieron las cinematografías de Europa del Este durante las décadas de los años 60 y 70 del siglo XX. Además, fue la primera realizadora en ganar el Oso de oro de Berlín por ‘Adopción’ (1975). Sin embargo, la directora ha sufrido un doble estigma a ojos de Occidente, el de ser directora del Este y el de ser mujer, es por eso que sus películas son fuertemente personales, políticas, honestas, feministas y auténticas.