El sábado 8 de Julio se vivió una velada histórica en la tierra del gofio.
Una banda de rock mítica llena (o casi) el Heliodoro con 20.000 almas rugientes y hambrientas de rock and roll esperaban a los chicos malos de Boston en una tarde calurosa amortiguada durante la muy correcta y potente actuación de La Pista Búlgara; una de las mejores bandas locales en las antípodas de los grupitos de diseño de ahora… gente que siempre ha entendido de que va esto de la música y que nos dieron «Fiesta» y mucho más.
Perfecto aperitivo hasta la colosal intro de las estrellas de cartel, con el envoltorio sonoro del «Carmina Burana», «Let,s the music do the talk»… pues eso; que la música hable: vinilos, conciertos, casettes… viejas y nuevas fotos en la pantalla hasta la irrupción atronadora de la banda y a la segunda va la vencida: «Toys in the Attic» pone en pie a un servidor, conocedor de que no se encontraba en el set list habitual de la gira, sorpresa seguido de tres impensables hits: «Love in a Elevator», «Living on the Edge» y «Rag Doll»… aquello ya amortizaba la entrada «Janie, s got a gun» es la segunda sorpresa de la noche… ¡only in tenerife! Y «Falling in Love» cierra, digamos, un primer bloque, para conducirnos a la parte blues y del concierto, donde Joe Perry literalmente se sale; vocal e instrumentalmente, con dos covers de los nunca bien valorados Fleetwood Mac (primera época): «Stop Messin’ Around» y «Oh Well», ponen el listón bien alto, con la banda metida de lleno en plena jam y Steven Tyler dándolo todo con la harmónica.
Comienza la recta final, desgranando himnos; el cover de los Beatles «Come Toguether», la balada más facilona de su repertorio (que ni siquiera compusieron), «I don,t wanna miss a thing», irónicamente la más coreada de la noche; y tres trallazos irresistibles: «Criying», «Dude(look like a lady)» y «Sweet Emotión»… esta última reabre la veda setentera y cierra el show, antes de los bises, lo que vino a continuación solo se puede calificar de épico; Tyler al piano y Perry encima del mismo con la camisa del Club Deportivo Tenerife interpretando de manera magistral su mejor lento y su primer clásico; un «Dream on» de quitarse el sombrero, con humo, papelitos y lo que se tercie… pero la esencia estaba ahí y un último juguete; «Walk this Way», probablemente su riff más conocido, con pista y gradas entregadas desgañitándose con el estribillo… Tom Hamilton, Joey Kramer y Brad Whitford se adelantan para la despedida y cierre… y la parroquia esperando un nuevo bis que nunca llegó, da igual… lo vivido anoche tardara en repetirse… que no quede en evento aislado que contarle a los nietos… ojala este sea un nuevo punto de partida para la música en las islas… que comience la era del Stadium Rock! Chip Away! (Fotografías cedida por Alicia Rojas y Alex Medina)
Por Adrián Gómez
Queremos agradecer a la Fundación CajaCanarias por dejarnos cubrir este evento