Museo de Historia y Antropología (La Laguna) del 15/03 al 26/05/2024
El pintor palmero, Facundo Fierro, nos propone un juego pictórico relacionado con la importancia de la producción azucarera tras la conquista europea del archipiélago. Canarias y Flandes, Flandes y Canarias, unidas por el azúcar y los vientos alisios, a través de la metáfora de dos ventanas abiertas. El reto es poder “ver” a esos flamencos que llegaron a las islas. Para ello busca entre las paredes de la casa palmera del flamenco Luis Van de Walle Van Praet un retrato, para ponerle cara a esa persona frente al silencio de la historia. La imaginación vuela en la mente de Facundo y para lograr reconstruir este rostro, se vale de los retratos realizados por diversos pintores holandeses e italianos, recreándolos con una posible nueva cara, en una serie que denomina Retratos Imaginarios. Finalmente, a partir de un cuadro del nieto de Luis Van de Walle Van Praet realizado por Antonio Moro, procede a reconstruir el posible semblante empleando las técnicas forenses del retrato robot.
Caras, azúcar, personas que construyeron Canarias y, también, Flandes, pasatiempo artístico en manos de Facundo Fierro que le sirve para demostrar su depurada técnica, sobre todo cuando hacemos el ejercicio de comparar los retratos originales con las interpretaciones del pintor palmero, una segunda capa de la exposición pues nos propone comparar la “realidad” con la “interpretación” realizada, cuando en ambos casos, son cuadros, son pinturas. Cosas de la psicología humana.
Fotografías y texto de Álex Ro