El mundo del cómic es uno de los más influyentes en la cultura popular actual, pero no siempre fue así. Hubo un tiempo en que los cómics eran considerados un pasatiempo infantil y sin importancia. Sin embargo, todo eso cambió en 1895, cuando se publicó el primer cómic de la historia, The Yellow Kid.
El autor de The Yellow Kid, Richard F. Outcault, era un dibujante que había trabajado en periódicos de Nueva York como ilustrador. En 1894, se unió al equipo de artistas del New York World, un periódico que estaba buscando formas de aumentar su circulación. Fue entonces cuando Outcault creó el personaje del Yellow Kid, un niño pobre de barrio que siempre estaba vestido con una camiseta amarilla y pantalones raídos.
«Hubo un tiempo en que los cómics eran considerados un pasatiempo infantil y sin importancia. Sin embargo, todo eso cambió en 1895, cuando se publicó el primer cómic de la historia, The Yellow Kid»
The Yellow Kid apareció por primera vez en el New York World el 5 de mayo de 1895, en una página dominical a color. La tira cómica se llamaba «Hogan’s Alley» y presentaba las aventuras del Yellow Kid y sus amigos en el barrio de la ciudad de Nueva York en el que vivían.
La opinión de la sociedad en esa época era mixta. Por un lado, algunos críticos consideraban que los cómics eran una forma de arte inferior y que estaban destinados solo a niños. Por otro lado, la mayoría de los lectores del New York World disfrutaban de las tiras cómicas y estaban encantados con el Yellow Kid. El personaje se convirtió en un gran éxito, y pronto empezó a aparecer en todo tipo de productos, desde tazas hasta cigarrillos.
Una de las anécdotas más interesantes de la publicación del primer cómic de la historia tiene que ver con el color de la camiseta del Yellow Kid. Originalmente, la camiseta del personaje era de color blanco. Sin embargo, cuando se imprimió la primera página de «Hogan’s Alley», el color se había desplazado, haciendo que la camiseta pareciera amarilla. A pesar de que este error fue corregido en ediciones posteriores, el Yellow Kid ya había adquirido su icónica camiseta amarilla en la mente de los lectores.
A pesar de las críticas iniciales, el personaje del Yellow Kid se convirtió en un éxito rotundo y cambió para siempre la forma en que se percibían los cómics. A día de hoy, sigue siendo un icono de la cultura popular y un ejemplo de la importancia de la creatividad y la innovación en la historia de la humanidad.