El consejero José Carlos Acha detalla que los trabajos cuentan con un presupuesto cercano a los 350.000 euros financiados por el Cabildo de Tenerife, “lo que refleja el compromiso de la institución insular con la preservación del patrimonio y la dinamización cultural de la isla”

Tras más de 30 años abierto al público, el Museo de Historia y Antropología de Tenerife (MHAT),en su sede la Casa Lercaro, llevará a cabo la primera fase del proyecto de remodelación de su exposición permanente, que incluye nuevos módulos expositivos, la renovación de la iluminación y de los elementos audiovisuales

Tras más de tres décadas abierto al público, el Museo de Historia y Antropología de Tenerife (MHAT), en su sede en la Casa Lercaro, del cabildo de Tenerife, renovará los espacios que forman parte de la exposición permanente. El equipo del centro museístico ha planteado la renovación de la exposición permanente a través de tres ejecutables anuales que se irán implementando sucesivamente y que se vienen trabajando desde hace tiempo: la redacción del nuevo discurso, la selección de piezas que lo acompañan e ilustran, así como en las contrataciones y procesos administrativos necesarios para materializarlo, todo ello con la colaboración de distintas Áreas y Departamentos del OAMC (Organismo Autónomo de Museos y Centros) al que pertenece.

Esta primera fase del proyecto cuenta con un presupuesto total de 344.540 euros financiados por el Cabildo de Tenerife, que aprobó, el pasado 16 de octubre, la modificación del Anexo IV de las Bases de Ejecución del Presupuesto 2024, que incluye esta aportación específica destinada al montaje de nuevos módulos expositivos, la renovación de la iluminación y de los elementos audiovisuales.

El consejero de Cultura y Museos de Tenerife, José Carlos Acha, explicó la importancia de llevar a cabo estos trabajos de remodelación, “para ofrecer un espacio cultural que responda a las necesidades del público, garantizando una mayor accesibilidad y una experiencia mucho más inmersiva, al tiempo que conservamos sus estancias con las características propias de la época del inmueble”. “Estas actuaciones vienen a reforzar el compromiso del Cabildo con la preservación del patrimonio y la dinamización cultural de Tenerife, que velen por su conservación y un discurso museístico renovado que incluya a la mujer y al conjunto de los grupos sociales en los diferentes modelos de socioeconómicos de Canarias a través de la protohistoria e historia”, destacó.

Asimismo, Acha subrayó que se trata se trata de un proyecto de carácter sostenible que pretende reutilizar la mayor parte de la museografía existente (paneles, vitrinas, luminarias, …) cuyo diseño ha resistido bien el paso del tiempo, pero modificando algunas características como la mejora de la accesibilidad a las colecciones expuestas por parte de los conservadores o la incorporación de nuevos sistemas en relación a la conservación de las mismas.

Nuevo proyecto

La exposición actual, influenciada por la Escuela de los Anales de Marc Bloch, aborda la historia de Tenerife a partir del análisis de los procesos económicos y de las estructuras sociales, presentando como principal hilo conductor la teoría de los monocultivos canarios, desde el azúcar en el siglo XVI hasta llegar a plátanos, papas y tomates en los siglos XIX y XX, junto al turismo como suerte de “monocultivo” sustentador de la economía del presente.

Este esquema básico está enriquecido con un ámbito dedicado a la familia Lercaro, constructores y primeros habitantes del edificio homónimo, que cierra el recorrido.

El nuevo planteamiento reubica colecciones y ámbitos, los cuales serán reducidos y renombrados, con tres grandes bloques que integrarán a los ya existentes. Además, cuestiones como identidad, género o descolonialidad, subyacen en los propósitos del nuevo discurso.

Además, permitirá incorporar colecciones hasta ahora alejadas de la vista pública por estar en zona de almacén. Los fondos han ido creciendo exponencialmente desde 1993 cuando se inauguró como modelo atípico de museo sin colección preexistente ya que nació con un marcado carácter divulgador y educativo frente a la carencia de fondos patrimoniales, que se fueron adquiriendo para ilustrar la narrativa de las salas permanentes y creciendo gracias al saludable recorrido vital que ha tenido la institución en estos 31 años.

Otros aspectos destacables son el aporte de nuevos datos sobre el pasado de Tenerife fruto de los avances en la investigación, que enriquecerán el conocimiento del público sobre la historia insular o el uso de nuevas tecnologías como la IA que, aplicadas desde una consideración ética, harán sin duda más atractiva la experiencia del visitante. Nuevos algoritmos de aprendizaje, interactividad y participación serán posibles.