Desde hace décadas, y especialmente desde que publicamos la primera edición de nuestra Guía Mágica de Canarias allá por el año 2003, hemos defendido las temáticas de misterios en Canarias, desde sus leyendas y mitos, pasando por el folklore mágico, su arqueología o la casuística insólita reciente, como un recurso de utilidad para ser incorporado a la oferta y narrativa turística. Ya sea como productos específicos o de manera transversal en los que ya se ofrecen, estas temáticas tienen una extraordinaria capacidad para llamar y retener la atención del visitante/escuchante, y generar en ellos posturas y comportamientos de respeto y puesta en valor de las islas que, quizá, por otras vías, resultarían más difíciles de lograr. El caso es que estas temáticas, aunque predominen o tengan una mayor densidad en algunos municipios, como puede ser el caso de La Laguna, Las Palmas de Gran Canaria o Gáldar, tienen presencia en todos los municipios del archipiélago.
La Villa y Puerto de Garachico es un excelente ejemplo de lo que decimos, y en este hermoso municipio nos fijaremos en las próximas líneas para demostrar lo que decimos, aportando ideas para que puedan seguirse pistas similares en otras localidades. Además, lo hacemos con el dulce eco del éxito de sus jornadas Garachico Insólito, promovidas en noviembre de 2025 por el Ayuntamiento de la localidad.
Convertir la adversidad en una leyenda.
Epidemias a través de su antiguo y rico puerto; riadas; inundaciones marítimas; erupciones volcánicas…a Garachico le ha sobrevolado la tragedia a lo largo de su historia, y ha sabido sobreponerse y brillar con luz propia a pesar de esas adversidades. “Glorioso en su adversidad”, reza su escudo, aludiendo a su resiliencia. En ese contexto, irrumpe un primer misterio, un atractivo que aparece bajo la forma de una supuesta maldición lanzada contra el pueblo por un fraile, desencantado con la falta de moral en la sociedad de su tiempo y el recreo de la misma en las riquezas y placeres mundanos. Cuentan que a caballo entre los siglos XVII y XVIII, un fraile desencantado con una población alejada de la verdadera religión y virtudes lanzaría la siguiente sentencia maldita “Garachico, puerto rico, gastadero de dineros, mal risco te caiga encima” En la creencia popular, ahí radica la causa de las adversidades padecidas por el pueblo. Lo importante no es tanto sí ese hecho ocurrió realmente, que lo es, sino la manera en la que la gente ha percibido que hay una razón sobrenatural para que ocurran dichas adversidades en la Villa y Puerto. Posiblemente nunca existió esa maldición, y eso también es interesante, dado que entonces se generó artificialmente como un recurso para entender la raíz de las adversidades, y con ello eliminar o paliar la incertidumbre, los porqués.
Con este punto de partida podemos explorar muchos enigmas y curiosidades de Garachico. En los archivos de la Santa Inquisición encontramos un material jugoso. Su pasado como puerto notable de Tenerife explica la cantidad y variedad de casos. Hemos encontrado un expediente sobre un personaje que hacía trucos de magia, y que termina ofreciendo una sesión privada a los máximos integrantes del tribunal; en otro proceso una acusada de hechicería cuenta que de niña tenía una muñeca que, colocada en un punto concreto del pueblo, tenía el “poder” de atraer a ese mismo lugar a la persona que la declarante quisiera; en otro caso, un monje encerrado en la cárcel es encontrado semidesnudo en las proximidades de un barco en el muelle, alegando que llegó allí gracias al Diablo, que lo sacó mágicamente de la celda. Finalmente, por no hacerlo más largo, tenemos el pacto con el Demonio de una monja a cambio de contacto carnal, un curioso episodio del que tenemos conocimiento gracias al arrepentimiento y confesión de la religiosa.
Sor Martina, pata negra del misterio.
En el casco histórico no faltan los lugares con fama de encantados. Son numerosos y la mayoría pertenecen a la esfera privada. Sin embargo, hay otro que ha terminado por trascender, el de las apariciones en el Hotel La Quinta Roja, en pleno corazón de Garachico. Algunos piensan que ese espectro puede ser el de Sor Martina, monja concepcionista con fama de santidad, protagonista de prodigios diversos. Durante unas décadas, dicha congregación ocupó ese lugar, de ahí la vinculación del fenómeno aparicionista con las monjas. Trabajadores y clientes han visto en la zona del antiguo jardín, en las escaleras y en algunas habitaciones.
En el convento se conserva parte de su cráneo, así como la pesada cruz que usaba en sus penitencias. Dicho convento, además, atesora una talla de San Agustín que sudó milagrosamente durante la erupción de Trevejos de 1706. Fray Juan de Jesús, el primer orientador espiritual de La Siervita, también tiene su historia personal con Garachico, y ya en pleno siglo XX, el municipio es escenario del milagro que lleva a los altares a Fray Escoba, el santo peruano fray Martín de Porres. Un niño del pueblo sufrió un accidente, y por la supuesta intercesión de este personaje, salvó su pierna de una amputación segura.
La lista es más larga, pero para muestra del potencial de Garachico en el universo del misterio, valgan estos botones.
José Gregorio González
Imagen en portada: Grabado sobre la erupción de Garachico de 1706. Imagen generada con IA








