La vida de Manuel Román cambió de forma drástica en 1984 cuando con 10 años vio la primera parte de la película Cazafantasmas (Ghostbuster), momento en el que descubrió su mundo y decidió ser en lo que se ha convertido hoy en día. En sus propias palabras, «un friki de los años ochenta y noventa» que vive en un universo en el que está acompañado de un grupo de amigos que de vez en cuando se visten con una réplica del traje de los Cazafantasmas, idéntico al original. Y otro tanto ocurre con el coche, una reproducción exacta del que sale en la película, la figura en tamaño gigante de uno de los personajes, la furgoneta de Scooby Doo y del protagonista a tamaño real incluido.
Junto a otros amigos ha fundado lo que llaman la Diputación Europea de los Cazafantasmas y tras su jubilación forzosa Román se dedica al mundo de los cómics y a fabricar piezas para los cosplay, colectivo que considera especialmente exigente y los más se lo curran en la Isla. Todo ello puede observarse durante estos días en el festival GG de Tenerife, una de las citas que logran reunir a los fanáticos de los dibujos, de los héroes y juegos de ordenadores. En el Recinto Ferial, Román ocupa un espacio físicamente limitado pero lleno de referencias en el que los visitantes pueden sacarse fotos con este grupo de amigos, lo que les gusta especialmente.
-La mayoría de las actividades que hacemos están relacionadas con el cómic pero también colaboramos con muchas ONGs, entre ellas Sonrisas Canarias, Cáritas, o la Telemaratón navideña… si nos llaman para hacer una obra social allí estaremos, totalmente vestidos y sobretodo con la mentalidad de querer pasarlo bien, ayudar y de que los demás se saquen las fotos que quieran con nosotros. Como somos de Los Realejos a veces bajamos al Puerto y allí el Ayuntamiento nos deja aparcar en un sitio para que la gente se fotografíe todo lo que quiera con nosotros. No hay ningún ánimo de lucro. Otra cosa es cuando nos llaman colegios, empresas o algún grupo concreto entonces lo único que pedimos es que la gente traiga comida o regalos pero para las ONGs.
-¿Cuántos años hace que están metidos en este mundo? Supongo que desde que salió la primera película en 1984.
-En el cosplay llevamos muchos años pero con Cazafantasmas, sólo tres desde que en 2021 hicieron una secuela uniendo a la generación de fanáticos nuevos con los antiguos. Ahora se cumplen los cuarenta años de la primera película pero antes no había esta misma afición por disfrazarte. En Carnavales nos poníamos una caja de cartón en la espalda y una manguera para que pareciera que disparábamos. Pero aquello no tiene nada que ver con lo de ahora con la ropa y el coche que son réplicas casi exactas de las películas. Cuando salió la secuela de 2021, decidimos que debíamos hacer réplicas de todo que fueran lo más perfectas posibles. A la gente les gusta, siempre nos piden permiso para sacarse fotos y por supuesto es lo menos que podemos hacer. Nunca ha habido problemas.
-¿Cuántas versiones hay de Cazafantasmas?
-Pues los chicos han hecho tres y luego hubo otra de chicas de hace diez o doce años. En total cuatro actualmente pero está previsto que salga una más.
-¿Tanto te impactó esta película y la saga?
-No es que te impacte a ti, sino también ver que tus hijos y tu familia se lo pasa bien disfrazándose por la tarde contigo. Lo importante es que lo disfrutes con tus amigos y con la familia. Nosotros tenemos disfraces de otros personajes pero nada se puede comparar a cuando nos vestimos de Cazafantasmas.
-¿Qué diferencia le has visto en esa película con respecto a otras parecidas?
-Aquella marcó un hito porque mezclaba el terror y el humor. Juntó el miedo del fantasma verde con los chistes sarcásticos de otro de los personajes.
-¿Qué recuerdas entonces del primer día que vistes aquella película siendo un niño?
-La he visto tantas veces… La primera fue en el cine Chimisay en el Puerto que ya no existe. En aquella época no había el merchadising que hay ahora y cuando veías un juguete en navidades todo el mundo lo quería. Aún guardo un muñeco de playmobil de aquellos años.
-¿Cuál es la secuela que más te ha gustado de todas?
-Está claro que la primera pero también la última por lo que supone unir los personajes viejos y nuevos y tener la ventaja de que los efectos especiales han evolucionado mucho en estos cuarenta años y, por ejemplo, los rayos láser de antes no tienen nada que ver con los de ahora. Visualmente la última es espectacular pero en cuanto contenido te diría que la primera es la mejor.
-¿Qué otras películas te han marcado?
-Soy un friki de los ochenta y noventa.
-Creo que también haces replicas, que te dedicas a las manualidades.
-Si por ejemplo de los Gremlins, de R2-D2… aquí al lado hay un Scooby Doo a tamaño real y luego está El Guardián de las llaves, Pajarito Amarillo, Alf.., represento todo lo que sea de esa época. Veo que la gente lo disfruta y sólo con eso yo también lo paso bien. Me han llamado desde la Fundación de Cine + Cómics para colaborar con el Salón del Cómic.
–¿Y de las nuevas películas no te gusta ninguna? Por ejemplo Guardianes de la Galaxia…
-Claro que sí. Estoy hablando de los ochenta y noventa pero luego está la Bruja Escarlata, Doctor Strange, que lo he hecho a tamaño real con 3D, Iron Man, el Joker, Darth Vader…
-¿Te da para vivir de esto?
-Vivo de dar clases sobre cómo hacer figuras y manualidades. Mucha gente también me pide que les haga aviones de radiocontrol.
-¿Qué es lo que más te ha costado fabricar?
-Las réplicas de los coches porque solo con el material y la mano de obra ya resultan muy caras. Pero son reales, pueden circular y pasan la ITV, lo único es que tengo que taparles las luces al de los Cazafantasmas. Hay figuras que cuesta hacerlas 150 euros y otras 4.000 pero no los vendo al público porque sería imposible, simplemente las hago para mi, para exposiciones y tenerlas en mi casa.
-¿Cuál ha sido la más complicada?
-La de Iron Man la hice en tres semanas, fue la que más tardé pero porque quería dejarla pulida, pulida y luego con Scooby Doo estuve sólo una pero porque tenía muchas ganas de hacerla.
-Parece que se tarda más.
-Depende del tiempo que le puedas dedicar cada día.
-¿Qué materiales usas para hacer las réplicas?
-Normalmente uso plástico reciclado después de fundirlo.
-¿Cuál es la técnica que empleas?
-Diseñas y modelas la imagen con 3D en un ordenador, lo pasas luego a archivos para poder imprimirlos, se unen las piezas como un puzzle…
-¿No has tenido nunca problemas con los derechos de autor?
-Es que yo no vendo el producto, soy sobre todo un fan, lo que hago es para mi. A lo que me dedico es a vender manualidades como macetas, hago diseños de Ratoncito Pérez, lápices, grabados pero nadie compra un producto de 4.000 euros. Un R2-D2 puede costarte hasta 12.000 euros, sólo en aluminio.
-Un apasionado de este mundo, que hay muchos, me da que no tendría problemas en gastar lo que fuera.
-Podrás vender una figura y no creo que mucha gente tenga 12.000 euros en el bolsillo, pero no una serie en cadena. Yo trabajo solo y si me pidieran diez me hundirían, no tengo capacidad. Hay gente que me dice que las haga y las venda por 800 euros pero la verdad es que nadie las compra y después está que no ganarías absolutamente nada si tienes en cuenta que se tarda al menos cinco meses pagando un local, la cuota de autónomo… Al final pierdes dinero, vivo de dar clases. Los colsplay me piden mucho que les haga espadas, anillos, la tres tazas del sombrerero loco…
-Ese muñeco gigante de la película Cazafantasmas lo hiciste tú también…
-No, lo hicieron por encargo en China con una especie de nylon pero más resistente. Es el malo de la película.
-De lo que me acuerdo es de la canción que fue un éxito por aquella época y que la cantaba Ray Parker jr.
-Entre el millón de cosas que tengo de las películas, los compañeros del grupo me buscaron en internet el disco original que salió en su día en vinilo. Eso no tiene precio, primero por lo que representa y luego porque es un regalo de los compañeros. Durante un tiempo busqué por aquí en Canarias pero no lo encontré. En la banda sonora de la película de 2021 hay una versión mezclada del tema original con muchos cambios.
-¿Tienes hijos? ¿Han heredado la misma afición?
-Tengo cuatro chicos. A ellos les gustan muchas de las películas que me gustaron a mi, las han visto todas pero son más de Pokemon, Goku, los caballeros del Zodiaco que a mi no me apasionan tanto aunque ahora estoy empezando a hacer figuras de estos personajes. No me llaman mucho la atención tal vez porque no veo demasiado la televisión que es donde más salen.
-¿Pero cuál es tu trabajo real?
-Soy electricista, tuve un accidente y me dieron la incapacidad total y una pensión. Pero me era imposible estar en mi casa jugando a la play o viendo la tele, así que me hice autónomo y doy clases y charlas sobre diseños de 3D en los colegios y en un local mío que es lo único que me permiten hacer por mi incapacidad.
Fotografías y texto de Noé Ramón