Esta semana Culturamanía y El Libro en Blanco recomendamos: «Aquellos días del Sáhara. 1973-1975.», de Pascual Ortuño, una novela que recrea el ambiente convulso que se vivía en España en aquellos años previos a la transición a la democracia.
Emilio Portón, estudiante de ingeniería en Valencia, es represaliado por su participación en las luchas universitarias de 1972 contra la dictadura. Tras su traslado forzoso a Madrid se ve involucrado en nuevas acciones subversivas, hasta que es enviado al Sáhara para prestar el
servicio militar obligatorio. En medio de la actividad guerrillera del Frente Polisario en pro de la independencia del territorio, se describe el impacto en los cuarteles de los importantes acontecimientos políticos internacionales, como el fin de la guerra de Vietnam o la Revolución de los Claveles en Portugal.
La novela recoge la represión de los movimientos clandestinos que se desarrollaron en el ejército entre los soldados y la caída de la Unión Militar Democrática (UMD) en el verano de 1975. En este contexto ascienden al primer plano las historias personales de los protagonistas.
Todo lo demás termina siendo aleatorio. Lo difícil era la supervivencia de unos jóvenes de la generación de los Beatles en un desierto hostil, inmersos en una guerra soterrada y surrealista que finalizó con una rendición incondicional de España y el abandono del territorio y del
pueblo saharaui cuando Marruecos impuso de facto su dominio con la <<Marcha Verde>>.
Compartimos un pequeño fragmento de la novela:
Emilio embarcó en el vuelo de las 14.00 horas de la compañía IBERIA del 14 de septiembre de 1974, de Madrid a El Aaiún, con escala en Tenerife. En el mismo avión regresaba de sus vacaciones de verano en la península el capitán Carlos Romero al que habían acompañado al aeropuerto para despedirlo su esposa y sus tres hijos. Toda la familia había tenido su
residencia en El Aaiún hasta la finalización del anterior curso escolar, pero para el que se iniciaba la habían fijado en Alcalá de Henares, por la incertidumbre de la situación en la colonia.
Carlos Romero era sobrino, nieto y bisnieto de militares. Había tenido su primer destino como teniente en el Regimiento de Ingenieros número 11, con sede en Salamanca, donde conoció a la que hoy es la madre de sus dos hijas mayores y del pequeño Fernando. Injustamente le habían hurtado ser el primero de su promoción por la sombra que pesaba en su familia:
su abuelo, también del arma de ingenieros, había sido un militar de talante liberal, y su tío Carlos, que era comandante en la plaza de Melilla, fue uno de los oficiales fusilados por Franco en los albores del golpe de estado por negarse a secundar el alzamiento. Su brillante
carrera la había completado con un doctorado en arquitectura civil y, gracias al dominio de varios idiomas, entre otros el alemán y el inglés, había participado en maniobras y ejercicios conjuntos con ejércitos de la OTAN.
Pascual Ortuño Muñoz es magistrado de la Sala de Familia de la Audiencia de Barcelona y profesor de másteres y posgrados de derecho de familia y mediación en el ámbito universitario europeo y latinoamericano. Fue director de la Escuela Judicial española. Con «Aquellos días del Sáhara» Pascual Ortuño entra en el mundo de la novela histórica, después del ensayo literario sobre <<Zenobia Camprubí versus Juan Ramón Jiménez>> en
el libro «A la sombra», editado por Alhulia en 2019 y de la excelente recepción que han tenido sus libros anteriores de relatos judiciales: «Justicia sin jueces», publicado por Ariel en 2018 e «Hijos ingratos», de Azar, publicada en 2020.