La tercera muestra que recoge el trabajo de algunas de las mejores y a veces desconocidas dibujantes canarias comenzará el próximo 17 de abril
La Fundación Cine + Cómic prepara la tercera edición del proyecto Ilustradoras & Ilustradas cuyo objetivo es sacar a la luz el trabajo de una serie de creadoras nacidas o que viven en Canarias que hasta ahora se veían obligadas a ocupar los pequeños y raros espacios en los que sus propuestas tenían cabida. Básicamente los recovecos de un mundo demasiado amplio y a veces saturado como es internet o apenas los puestos en los mercadillos especializados.
Al frente de esta novedosa iniciativa aparece como comisaria, Camila Pomares, quien indica que la inauguración tendrá lugar el próximo 17 de abril en la sala de exposiciones del Parlamento canario con la presencia del presidente, Gustavo Matos. La fórmula de estas edición será similar que la de las anteriores; tratará de una exposición fija, otra itinerante en formato presencial y virtual y tres encuentros por videoconferencias con algunas de las artistas. Luego está la publicación de un libro en el que aparecen los trabajos elegidos y que se ha convertido en una apreciada joya por su duración en el tiempo y valor que tiene para las autoras a la hora de demostrar su talento.
En estos momentos se está editando el folleto con el cartel original obra de Talamaletina, seudónimo de Carla Clementina Fernández en el que se puede observar el dibujo de una mujer pelirroja sonriente que aparece cabeza abajo. Los encuentros virtuales correrán a cargo del director de la Fundación, Lucas Morales y las invitadas son Zarimoth, Noelia Cabo y Sonia Fernández.
El centenar de dibujantes que cada año tienen la suerte de poder subirse a este carro va a ver cómo su trabajo es expuesto en las distintas muestras y luego aparece en el libro, cuya portada coincide con el cartel de cada edición. Entre los pocos requisitos que se imponen está el género, una acreditada relación con las Islas aunque vivan en otro país y especialmente que la temática elegida gire entorno al mundo de lo femenino.
Pero por suerte las definiciones en cuanto a sexo se han ampliado en progresión geométrica y por ello en ciertos casos se habla de personas no binarias, trans o todo lo que puedan encuadrarse dentro de este universo en continua expansión y variedad. Prohibidos y vetados por lo tanto cualquier contenido machista, en el sentido más rancio del término, a no ser que sea para desmontarlo pieza por pieza. Ilustradoras & Ilustradas, más que una iniciativa feminista es una apuesta por lo femenino, término que a su vez se va ampliando, afortunadamente, con todos sus matices, opiniones, coincidencias y divergencias.
La primera edición tuvo lugar en 2021 y en aquel entonces se logró recopilar el trabajo de 104 participantes, que sumaron 106 en 2022 y 105 para este año. Cifras que hablan claramente de que existe una estabilización en el mundo de las creadoras, que coincide también con el de las obras que optan a ser elegidas y que se mantienen entorno a las doscientas por edición. Toda una sorpresa si se tiene en cuenta que las previsiones iniciales apuntaban a que en la primera convocatoria no se sobrepasaría el medio centenar.
Los pasos iniciales siempre son los más difíciles y en este proyecto además resultaron sorprendentes. Los impulsores tuvieron que navegar e investigar para contactar con las mujeres que se dedicaban a este mundo en Canarias y la respuesta resultó de lo más llamativa porque nadie se esperaban que fuera tan apabullante. Una vez que se logró localizar a las primeras creadoras, se produjo una especie de reacción en cadena, contactaron entre ellas y fueron surgiendo los demás nombres. Prueba de que había todo una submundo esperando a una excusa coherente para salir a la luz.
Con el fin de apoyar aún más a estas autoras, junto a cada una de sus ilustraciones en la exposición y en el libro se incluye una pequeña biografía, informaciones que sean relevantes y alguna otra obra suya. Todas y cada una reciben un libro que hasta ahora siempre ha destacado por su cuidado diseño, lo que los convierte en aún más llamativos y valiosos. La tirada inicial se compone de unos doscientos ejemplares, que se reparten entre las participantes y luego se regalan los restantes. Pero a continuación saldrán a la venta en las determinadas y minoritarias librerías especializadas en este tipo de contenidos. La entrega a cada una de las artistas se lleva a cabo cuando tiene lugar la inauguración en las distintas Islas, excepto en 2021 debido a las restricciones que todavía imponía la pandemia, por lo que las autoras recogían sus ejemplares en la propia sede de la Fundación en Santa Cruz.
Camila Pomares apunta que la intención última es “realzar el valor de la mujer y de lo femenino, en el cómic”, y hacerlo de la manera más eficaz: dando a conocer sus trabajos, su personalidad y trayectoria vital como medio para compensar la sobresaturación de la figura masculina que también se repite en el mundo del cómic. Pero a la vez el proyecto se enmarca perfectamente en el fin de la Fundación de descubrir a los nuevos creadores canarios, con la diferencia de que en este caso concreto se podría hablar de una “discriminación positiva” tanto que Ilustradoras & Ilustradas es un terreno exclusivo reservado para las mujeres.
Aprender y extraer sus propias conclusiones es otra posibilidad que está al alcance de cualquier persona que tenga la suficiente apertura mental. “Es evidente que como ocurre casi siempre a las mujeres les cuesta todo un poco más y por ello creemos que necesitan también más ayuda”, dice la comisaria. De forma paralela se llevan a cabo otras iniciativas que enriquecen al proyecto como son las charlas virtuales con algunas de las artistas lo que amplia de forma considerable las oportunidades de conocerlas en profundidad.
Posiblemente la única limitación real y concreta de Ilustradoras & Ilustradas es que cada obra debe enmarcarse en un formato vertical de 50×70 centímetros desprovisto de marcos. Pero en ese espacio que para algunos puede ser limitado, para otros resulta casi infinito y contiene una enorme variedad de propuestas. Un año más se ha procedido a escoger las piezas y autoras, proceso que puede resultar a la vez enriquecedor pero también muy duro en cuanto que es preciso realizar un criba por limitaciones físicas de la Sala. Lo más difícil fue el primer año cuando se inscribieron 210 participantes, “y aquello se convirtió en una especie de locura porque algunas eran muy buenas pero estábamos obligados a hacer forzosamente una selección”, indica.
Entre las participantes se encuentra una minoría que son profesionales, como Michaela Konrad, personas que se dedican a la ilustración de forma puntual o por afición y un nada despreciable número de creadoras nacidas en las islas que residen en países como Inglaterra, Francia o Italia, por decir algunos. Un requisito más es que deben ser mayores de edad o contar con el permiso de sus padres o tutores, lo que hasta ahora sólo ha ocurrido en una ocasión.
En cada edición tampoco es inusual que se repitan autoras si destacan por sus trabajos de calidad y marcada personalidad, por lo que supone un lujo volver a contar de nuevo con ellas. “Intentamos que se refleje un poco de todo”, dice Camila Pomares quien es la autora del prólogo de cada una de las anteriores ediciones del libro y también lo será de éste.
En general, las participantes son estudiantes cuya pasión es dibujar aunque también hay escultoras, actrices y en cierta medida quienes dedican al mundo de la animación actualmente en auge en las Islas. “Hablamos de mujeres que hacen dibujos, casi siempre, para los niños y que trabajan en un importante número de estudios que se han asentado en Canarias. Otras por el contrario prefieren ir por libre sin horarios ni jefes y luego vender sus productos en internet o en las ferias de cómics ofreciendo llaveros, camisetas, carteras o los propios dibujos”. Más limitada es la posibilidad de que sus trabajos tengan salida efectiva y la mayoría deben darse a conocer a través de internet y muy pocas mediante la televisión.
“La tecnología está ayudando muchísimo hasta el punto de que hay casos en los que ya no puedes distinguir si lo que estás viendo ha sido hecho de forma digital o utilizando pinceles, óleos o incluso lápices o bolígrafos”. De hecho, sería posible elegir una obra hecha con encaje de bolillos siempre y cuando encajara con la filosofía de Ilustradoras & Ilustradas. Porque el fondo y la forma caminan en paralelo. En una de las ediciones se experimentó de manera que en varios cuadros se veía una secuencia animada de un esquimal realizando distintas tareas, lo que supuso un medio didáctico para conocer el proceso creativo y prueba de que las posibilidades son infinitas. Para las creadores las ventajas que trae consigo ser elegidas supone un paso importante en su currículum en cuanto trascienden el mundo de internet sin límites pero también masificado, ver como pueden presentar sus obras formatos distintos a un portafolio o tener que limitarse a la autoedición en el mejor de los supuestos.
Para Camila Pomares lo principal y más destacable, al fin y al cabo, es constatar cómo el proyecto tiene continuidad y que la atención de los medios y ciudadanos va creciendo en cada una de las ediciones. Y por supuesto la ayuda que implica para las creadoras que hasta ahora se tenían que mover en terrenos muy acotados. En esta línea junto a las obras aparece la dirección electrónica para que quienes estén interesados puedan contactar con cada una de ellas.
La comisaria de la muestra, lógicamente, prefiere guardarse el nombre de las autoras que más le han impresionado y prefiere resaltar que en realidad lo destacable ha sido constatar cómo desde el principio le ha sorprendido la enorme variedad de técnicas, estilos, temáticas y trayectoria vital de las participantes. Otro dato llamativo es que en la segunda edición predominaran los colores oscuros en detrimento de los más vivos, quizás como consecuencia del tránsito que supuso la pandemia y las secuelas mentales que dejó en una población que vivió atemorizada y enclaustrada durante meses. “Pero tal vez todo se debió a una casualidad”, añade.
Los regalos son mutuos. Las creadoras se dan a conocer pero los organizadores disfrutan con los preparativos, el resultado final y conociendo a autoras con una calidad más que remarcada y que les sorprende pese al amplio conocimiento que tienen de este mundo. “Te das cuenta de que ha sido una pena que estas mujeres hayan permanecido hasta ahora siendo desconocidas durante tanto tiempo porque antes de este proyecto no había nada, no existía ningún canal de esta envergadura para darse a conocer”.
En realidad no se hace distinciones entre ilustradoras o dibujantes de cómics, lo importante es constatar que se intenta transmitir un mensaje, contar una historia y ver cómo cada una busca su propio estilo y forma de comunicarse. “Para nosotros el concepto de ilustración es muy abierto y en él cabe todo el talento que hay en Canarias”. Como anécdota recuerda que en Barcelona visitó una exposición sobre creadoras del siglo XX y pudo comprobar que la cantidad de obras era menor a la de Ilustradoras & Ilustradas.
Autoría del texto: Noé Ramón