«Un paseo por INDIA» es el trabajo resultante de un viaje llevado a cabo al subcontinente indio en los meses de noviembre y diciembre de 2014. Utilizando como medio de transporte el tren, este viaje me llevo a recorrer las ciudades de Delhi, Amritsar, Varanasi, Kajuraho, Agra, Jaipur y Jodhpur, a lo largo de 27 intensos días. Un recorrido que puede resultar corto desde el punto de las ciudades conocidas pero no tanto una vez enfrentados los kilómetros y el peculiar sistema ferroviario indio.
Esta muestra pretende ser, por tanto, un paseo. Un corto lapsus de tiempo en un país milenario y un breve recorrido por sus infinitas ciudades. Lejos de ambiciosas pretensiones, se intenta enseñar un ápice de las personas y la cultura de India; sus creencias; ritos; la convivencia; la vida y por ende, la muerte.
Como en trabajos anteriores en «un paseo por INDIA» hay un olvido voluntario de la arquitectura y los paisajes, solo referenciados como soporte a la presencia humana en ellos. Es, por tanto, un trabajo fotográfico que se centra en lo humano, en esos instantes irrepetibles de la acción de hombres y mujeres en su cotidianidad. El espectador hallará paisajes humanos cargados de vida y del color que inunda India, convertida en policromía pictórica para placer del observador. Cada rincón es una poesía de colores, una bella composición que tan solo precisa del correcto encuadre del fotógrafo y con la mágica complicidad de la luz.
Ha sido un trabajo prolífico en resultados tanto como el viaje lo ha sido en experiencias, complicando sobremanera la labor de selección de las fotografías a exhibir. El conjunto seleccionado intenta reflejar algo de cada ciudad visitada. Aunque en el proyecto hay mini series que guardan respeto a una misma temática, lo aquí expuesto se moverá por criterios más artísticos que documentales.
Mi trabajo se lleva a cabo en la calle, caminando desde la mañana hasta que la luz se atenúa para morir en la nocturna oscuridad. Calles, mercados, centros religiosos, estaciones de tren, plazas son los escenarios preferidos para captar instantes y situaciones. No hay posados previamente contratados o concertados entre autor y protagonista; salvo ese convenio fugaz firmado con un gesto o sonrisa de aprobación por parte del «modelo», rubricado finalmente con la muestra del resultado en el visor de la cámara.
Tampoco hay más luz que la luz que hay. Decía un afamado fotógrafo que en la fotografía documental no se debe usar luz por respeto a la luz existente. Por ese motivo, he guardado absoluto respeto a la luz adaptando el trabajo y el momento a su presencia y a su ausencia.
Estas fotografías no pretenden mostrar qué es India. Tamaña empresa requeriría de meses de proyecto y de una exhibición mastodóntica. Tan solo pretende ser la visión de un viajero en un periplo, «en un paseo por INDIA». Mostrar el lado humano, demostrar lo iguales que somos unos con otros a pesar de las diferencias culturales. Hay muchas más cosas que nos unen que las que nos separan.
Fruto de este trabajo y extraídas del mismo, la serie “Trenes de India” valió la nominación a Fotógrafo Emergente dentro del Festival PhotoEspaña 2015 y la titulada “Ritos de fuego en Varanasi” a integrar la serie Atlánticas Colectivas dentro de la Bienal Fotonoviembre 2015.
Para hacer posible esta exposición se emprendió un proyecto de micro mecenazgo a través de la plataforma de crowfunding de Verkami. Alcanzando, en el plazo fijado de 40 días, el éxito gracias a las aportaciones de 74 mecenas que depositaron su confianza en esta exposición.
Estos mecenas han promovido que “un paseo por INDIA” conste de 30 fotografías impresas con los mejores materiales disponibles y en gran formato que intentarán llenar la sala del color y luz reinantes en el país asiático.
