La cita con ‘El bar nuestro de cada día’ tendrá lugar el 10 de agosto, a las 19:15 y las 23:00 horas
El espectáculo El bar nuestro de cada día, de la compañía Chipi La Canalla, que forma parte de la programación de la III Edición del Festival Veranos del Taoro, ha recibido el galardón Al Mejor Espectáculo, en la 41 edición de Palma Feria de Artes Escénicas de Andalucía. En Tenerife, en la zona Arboleda del Parque Taoro (Puerto de la Cruz), se podrá disfrutar de este monólogo musical en clave de humor, el 10 de agosto, en dos sesiones, a las 19:15 horas y a las 23:00 horas. Las entradas están a la venta a través de Tomaticket y de la página web del Festival Veranos del Taoro.
Creado y producido por Encaro Factory, el Festival Veranos del Taoro cuenta, para esta tercera edición, con el patrocinio del Ayuntamiento de Puerto de la Cruz, Cabildo Insular de Tenerife (Tenerife! Despierta Emociones), Gobierno de Canarias (Turismo de Islas Canarias; Islas Canarias, Latitud de Vida), Heineken, Aqualia y Lopesan Hotel Group, así como la colaboración de Linaje del Pago, Simón Martín, Coca Cola, Asociación de Desarrollo Empresarial (Adep), el Centro de Iniciativas y Turismo (CIT) de Puerto de la Cruz y Cadena SER.
Bienvenidos al bar de todos
El camarero de El bar nuestro de cada día, Antonio Romera Chipi, intenta, en esta historia, cumplir la última voluntad de un cliente difunto, llamado Malandro, que ha dejado pagada una fiesta, en vez del entierro convencional en un tanatorio. Durante el espectáculo, entre anécdotas y canciones, desgrana su trayectoria vital, ante un público que se convertirá en parroquiano de este particular bar.
Música y palabras
Antonio Romera Chipi es guionista, además de compositor y vocalista de La Canalla, con la que ha lanzado al mercado ya tres trabajos discográficos. Como autor de canciones ha compuesto temas para artistas como Silvia Pérez Cruz, Salvador Sobralo, Toni Zenet o Pasión Vega.
Este bar nuestro de cada día es la confluencia de sus dos universos creativos: el guion y la canción. Monólogos y canciones se entrelazan con mucho sentido del humor, en un espectáculo que reivindica los bares como lugares de cultura a la vida y a nosotros mismos.
