Víctor Jaubert es un dibujante nacido en Tenerife pero que  rápidamente se fue a vivir  a La Palma donde pasó una infancia que ha marcado totalmente su estilo. Este ilustrador pese a su edad puede alardear de contar ya con una carrera que se extiende por algo más de dos décadas. En sus inicios fueron los familiares y amigos de La Palma quienes lo apoyaron de forma incondicional de manera que sus cíclicas exposiciones se convirtieron en una especie de rito anual al estilo de los conciertos en el Teatro Chico de los también palmeros, Troveros de Asieta. Pero está claro que en su continuidad ha tenido más que ver sus dibujos inspirados en series de televisión de los años setenta y ochenta como los de la saga Hanna-Barbera, musicales y todo un mundo de influencias que este ilustrador ha sabido manejar para convertirlas en una propuesta totalmente original. Él mismo explica su trayectoria.

-Estudié Bellas Artes en Tenerife, luego me dieron una beca Erasmus y estuve en el extranjero. Cuando terminé la carrera la verdad es que era tal la ansiedad que tenía por dibujar que me arriesgué a hacer mis primeras exposiciones, incluso cuando aún era becario, gracias al apoyo de mi familia y de gente cercana que creía en mí y que me compraban los trabajos poco a poco. Después inicié una línea editorial y ahí estoy especialmente orgulloso de dos libros que saqué con mis propios medios y que luego fueron apoyados por instituciones como el Cabildo de La Palma o el Ayuntamiento de Santa Cruz de La Palma sobre la Bajada y los Indianos. Hice el cartel de Los Indianos en las ediciones desde 2013 a 2015. Desde que comencé por suerte todo ha ido in crescendo.

-Pero creo que tu trabajo editorial ha tenido más recorrido que los libros que han sido encargos directos de instituciones.

-Sí desde 2002 he hecho varios libros de texto para colegios sobre un montón de temas, por ejemplo hablando de personajes canarios y a la vez sigo con las exposiciones aunque lo cierto es que tras la pandemia me interesan más los libros, porque es algo a lo que le he cogido mucho gusto.

-Creo que en un par de meses tendrás otro más en la calle. 

-Sí sacaré uno sobre La Palma en el que hago un recorrido por los catorce municipios. Es una iniciativa particular que luego suelen apoyar las instituciones y que en otros casos ha tenido muy buena acogida e incluso ya han llegado a salir segundas ediciones. 

-¿Porque crees que tiene tanto éxito tu estilo a la hora de intentar llegar a los niños?

-Supongo que quienes me los encargan habrán visto la necesidad de que los niños conozcan aspectos como las fiestas populares y la verdad es que los libros que hemos sacado han gustado mucho porque son como una especie de manual o de instrucciones sobre lo que van a ver mientras que a los adultos les gusta recordar su niñez. Como la Bajada no se celebró en la anterior edición por la pandemia ahora era más necesario que nunca contarles a los niños lo que van a ver en la próxima.

-Por cierto ¿cómo te afectó la pandemia?

-El confinamiento me dio la posibilidad de centrarme más en la línea editorial y menos en las exposiciones que entonces eran totalmente inviables. Así que en general tuvo un efecto positivo porque pude adentrarme en un campo que, como ya he dicho, me interesa ahora mismo más que el de las exposiciones en el que más me había centrado hasta entonces. 

-Está claro que La Palma te ha influido enormemente al igual que la cultura de los dibujos animados que se veían en la tele en aquellos años. 

-Pasé toda mi niñez en La Palma cuando la calle Real era como un pasillo de tu casa donde te podías encontrar con todo el mundo. Me encanta la Isla y estoy agradecido porque ha sido el primer lugar en el que me arroparon y apoyaron desde el principio y también ahora, tanto en las exposiciones como en los libros. 

    -¿Y en cuanto a los dibujos animados de aquellos años?

   -Es cierto que estoy muy influido por aquella televisión que tiene muy poco que ver con la actual, más que nada porque ahora hay tanta variedad que es imposible abarcarlo todo, te pierdes un montón de cosas, cuando vas por la segunda serie te olvidas de la primera. Lo que más me ha gustado siempre son dibujos como los Autos Locos, al verlos ahora me parecen lentos pero me sigue gustando la estética, el trabajo artesanal y los doblajes.

-También has sacado un libro que se llama Miércoles.

-Es una historia de Daniel Nesquens sobre un niño que se siente solo tanto en la familia como en sociedad y entonces aparece un ser que lo viene a visitar todos los miércoles, de ahí el título. Pero la mayoría de los libros que he sacado son un montón de trabajos conjuntos con instituciones sobre aspectos de las Islas y de la historia. 

-¿Cuánto tiempo le dedicas al día a dibujar?

-Todo el día todo los días. Soy autónomo, no tengo horario fijo, así que depende del trabajo. La suerte es que no he parado desde que empecé y que he podido convertir en trabajo lo que de pequeño era mi hobby. 

-¿Cuál es tu relación con la Fundación Canaria Cine + Cómics?

-Estoy en una especie de base de datos que tienen ellos y colaboro con el Salón del Cómic que celebran cada año. También cedí mi trabajo al Proyecto Volcán, una iniciativa que impulsaron con el fin de ayudar a las víctimas del volcán de El Paso y que ha recorrido diversas Islas recaudando fondos. Debido a la erupción también diseñe unas talegas con el lema Fuerza La Palma que utilizaba las fuerzas de seguridad de la Isla. Estuvo bien y de hecho se llegaron a elaborar unas 25.000 talegas.

-¿Qué diferencia hay entre los libros que editas tú mismo y los encargos?

-Los encargos son más mecánicos, aunque sin perder romanticismo. Me dan el texto, la referencia, el personaje y las indicaciones sobre aspectos como la vestimenta y a partir de ahí tienes que usar la imaginación. De esta manera he trabajado en La Palma, La Orotava, La Laguna o Arona, supongo que será gracias al boca a boca. 

-¿Qué próximos proyectos tienes entre manos?

-Además del libro, por ejemplo, voy a participar en una exposición colectiva sobre diseños de toallas que se va a llevar a cabo en Las Teresitas. Pero ya digo ahora mismo se está imponiendo más la parte de publicar libros que tienen mayor duración en el tiempo y te permiten llegar a más gente. La ventaja de las exposiciones es que te dan la oportunidad de mantener un contacto más directo con la gente. Así y todo ahora me centro más en la parte editorial.