El spinoff de La casa de papel está protagonizado
por Pedro Alonso, Michelle Jenner, Tristán Ulloa, Begoña Vargas,
Julio Peña Fernández y Joel Sánchez
146 localizaciones, 287 sets, 65 actores y actrices, más de 1400 figurantes y nueve meses de rodaje después, llega BERLÍN. El spinoff de La casa de papel se estrena el próximo 29 de diciembre en todo el mundo a través de Netflix.
Rodada en diversas localizaciones de París, Madrid, Almería, León, Ávila, Segovia y Toledo, esta serie narra uno de los robos más extraordinarios del icónico personaje interpretado por Pedro Alonso, que retoma el papel del hedonista y astuto Berlín.
Junto a él, su nueva banda: Michelle Jenner (Isabel) interpreta a Keila, una eminencia en ingeniería electrónica; Tristán Ulloa (Fariña) se pone en la piel de Damián, un catedrático filántropo y confidente de Berlín; Begoña Vargas (Bienvenidos a Edén) interpreta a Cameron, una kamikaze que vive siempre al límite; Julio Peña Fernández (A través de mi ventana) da vida a Roi, el fiel escudero de Berlín; y Joel Sánchez interpreta a Bruce, el implacable hombre de acción en la banda. Itziar Ituño (La casa de papel) y Najwa Nimri (La casa de papel) retoman sus papeles como las policías Raquel Murillo y Alicia Sierra respectivamente
Completan el reparto de BERLÍN, Samantha Siqueiros (Señora Acero), Julien Paschal (Un año, una noche), Masi Rodríguez y Rachel Lascar (A través de mi ventana).
Los ocho episodios de la serie, creada por Álex Pina (La casa de papel, Sky Rojo) y Esther Martínez Lobato (La casa de papel, Sky Rojo), están escritos por Álex Pina, Esther Martinez Lobato, David Barrocal, David Oliva y Lorena G. Maldonado, y están dirigidos por Albert Pintó (Sky Rojo, Malasaña 32), David Barrocal (Sky Rojo) y Geoffrey Cowper (Tercer Grado).
SOBRE BERLÍN
Sólo hay dos cosas que pueden convertir un día de perros en un día maravilloso: una es el amor y la otra, un botín millonario. Esos son los motores que mueven a Berlín en sus años dorados, cuando aún no tiene noción de su enfermedad ni está encerrado como una rata en la Fábrica de la Moneda. Aquí se dedica a preparar uno de sus robos más extraordinarios: hacer desaparecer 44 millones en joyas como si fuera un número de ilusionismo, y para ello cuenta con una de las tres bandas con las que ha robado en su vida.