La expedición de la Isla Baja partirá el 29 de abril y estará hasta el 2 de mayo en Bambey, lugar de origen de Hermanos Thioune, quienes colideran la iniciativa.
La segunda fase del proyecto intercultural Yoko llevará al país africano a alumnado de la Escuela Comarcal de Música Daute-Isla Baja. Bajo el título Yoko Senegal, 15 jóvenes de entre 15 y 18 años de Garachico, Los Silos y Buenavista del Norte tendrán la oportunidad de realizar este intercambio cultural en el ámbito musical en el país africano.
La expedición de la Isla Baja partirá el próximo 29 de abril y estará hasta el 2 de mayo en Bambey, lugar de origen de Hermanos Thioune, quienes colideran la iniciativa intercultural en el ámbito musical. El proyecto ya contó con una primera fase, Yoko Isla Baja, protagonizada por Khaly Thioune quien impartió una serie de talleres socioeducativos en la escuela de música de la Isla Baja y en los centros educativos de la comarca. También se impartieron talleres de danza africana, entre otras iniciativas.
Un total de 29 personas conforman la expedición que viajará a Bambey para continuar con la segunda fase de Yoko. Durante la estancia de los jóvenes allí se realizarán talleres con el grupo de menores del Centro Cultural de Bambey, fundado por Hermanos Thioune. Se trata de realizar un intercambio cultural demostrando el poder transformador de la música. Serán tres días de formación musical intensa en la que compartir experiencias con el alumnado de Bambey.
Además de los 15 alumnos y alumnas, el grupo estará compuesto por tres profesores y la directora de la Escuela Comarcal de Música Daute-Isla Baja y coordinadora del proyecto, Juani Bolaños; por personal no docente de la propia escuela, por representantes del Consorcio Isla Baja, una etnomusicóloga, personal audiovisual y de prensa. También se contará con la presencia de miembros de Acción Exterior tanto del Gobierno de Canarias como del Cabildo Insular de Tenerife.
Esta segunda fase es el primer paso para la continuación del proyecto que tiende a expandirse a otros municipios canarios de la red Pueblos Creativos (ICDC). Esta será la tercera fase. La primera etapa del proyecto Yoko dejó muy claro el poder transformador y de intercambio cultural y social que tiene la música. Además, demostró que no es necesario hablar el mismo idioma para entenderse entre culturas distintas.
