El músico Nala Rami, ganador del primer premio en la XI edición del Festival Sonora Las Palmas de Gran Canaria, comparte su emoción y reflexiona sobre las oportunidades que este reconocimiento brinda a su carrera. En una entrevista exclusiva para Culturamanía, Nala Rami expresa sus expectativas para futuros eventos musicales, su evolución artística hacia sonidos ochenteros y latinos, así como sus experiencias como músico de sesión y colaborador en diversos proyectos.

Enhorabuena por ganar el primer premio en la XI edición del Festival Sonora Las Palmas de Gran Canaria. ¿Cómo te sientes al obtener este reconocimiento y qué significado tiene para ti y tu carrera?

R- Muchas gracias, la verdad que estoy muy contento, sobre todo por las facilidades y oportunidades que nos brindan los premios. Las posibilidades de ir a tocar a festivales y a parte tener una bolsa de dinero para poder producir material artístico, todo esto hace que se dibuje un camino un poco más definido y poder seguir dando pasitos hacia adelante.

Teniendo en cuenta tu éxito reviente en el Sonora de Las Palmas de Gran Canaria, donde ganaste el primer premio, ahora tienes la oportunidad de participar en eventos como el Sonidos Líquidos de Lanzarote, Phe Festival y Festival Boreal de Tenerife. ¿Qué expectativas tienes para estas nuevas experiencias y qué crees que aportarán a tu trayectoria artística?

R- Hay dos cosas en las que pienso, la primera es que gracias a poder hacer esta mini gira nos de la oportunidad de rodar la banda y seguir moldeando el sonido Nala Rami en este formato, y por consecuencia seguir aprendiendo tanto en lo musical como en lo personal. Lo segundo es la posibilidad de llegar a más personas para conectar y encontrar nuestro público ganando visibilidad, para empezar a instaurarnos y consagrarnos como banda de disco/funk de autor en el circuito musical de las islas.

Tu música ha evolucionado desde tus primeros singles con predominancia electrónica hacia un sonido con toques ochenteros y latinos. ¿Qué te ha inspirado para este cambio y planeas seguir explorando esta senda en futuras producciones?

R- Creo que el cambio de ciudad a influenciado bastante, o quizás fue un cambio de pensamiento que me hizo cambiar de ciudad.. que fue primero el huevo o la gallina?

Barcelona me inspira a urbanidad, neones, rock n roll, arte moderno, fugacidad con ello venía con un set mental bastante específico, en cambio el estilo de vida actual que tengo en canarias es otra cosa totalmente diferente, aquí tiro de naturaleza, comunidad, raíces , espiritualidad, todo esto afecta en la manera que estoy componiendo todo lo nuevo. Sobre todo el estar en comunidad hace me animara a formar la banda y con ello una mutación hacia sonidos más orgánicos.

Has mencionado que la música que acompañó tu infancia, abarcando los años 70, 80 y 90, es una gran influencia en tu trabajo. ¿Qué elementos específicos de esa época te atraen y cómo los incorporas en tu música actual?

R- Hay ciertas progresiones de acordes, sonidos de sintetizadores, el saxo (mi instrumento principal) es un instrumento con mucho lenguaje fundado en los 70s y 80s. Igualmente 70s, 80, 90, son tres décadas muy diferentes. De los 70s me quedo con la frescura, espontaneidad, la espiritualidad y lo orgánico de la música. De los 80s me quedo con los sintetizadores, lo electrónico, el punk y lo visual. De los 90s me quedo con el hiphop, el house y los samples. También me inspiro en elementos actuales y otros de lo que para mi será el futuro, de cada década podemos extraer inspiración para incluirlo todo en el sonido moderno de hoy.

Además de tu carrera como Nala Rami, también has participado como músico de sesión y en otros proyectos como Tversky. ¿Cómo encuentras el equilibrio entre estas distintas facetas creativas y cómo se complementan en tu desarrollo artístico?

R- Tversky esta muy en standby, pero mientras estábamos girando y haciendo discos seguía haciendo bolos de jazz y tocando para otras bandas como músico de sesión tanto en estudio como en directo acumulando gran cantidad de experiencias, recuerdos, situaciones y conociendo a gente en el camino que suman al gran saco de la experiencia. Pero la verdad es que estoy muy agradecido de poder tener todas estas experiencias vitales/musicales, aunque a veces me veo haciendo malabares y llegando a picos de estrés algo fuertes, siento que es más lo que me nutre que otra cosa. También te digo que como artista emergente no queda mucha otra opción que ser pluri empleado hahaha.

Hablando de tus colaboraciones como músico de sesión, has tenido la oportunidad de trabajar con artistas destacados como Bandalos Chinos y Cabiria. ¿Cómo ha sido esa experiencia y cómo crees que ha impactado en tu propia música?

R- He tenido la suerte de trabajar con algunxs artistxs que admiro mucho, que algunos de estos te metan en su equipo y te consideren uno más, es un gran elogio, es un buen ego boost hahaha, además de ganar en lo explicaba en la pregunta anterior. En el caso particular de los Bandalos Chinos , fueron un poco los que inspiraron a montar banda, las giras con un buen equipo humano, aportando cada uno de ellxs su calidad como personas y como músicxs es lo que ahora mismo más me hace vibrar y más me ayuda a aprender y progresar en todos los sentidos. Así apliqué la misma filosofía para mi proyecto, y la verdad es que siento que donde estoy ya lo he conseguido en gran parte.

Muchos artistas enfrentan desafíos en el camino y a veces se cuestionan sobre la viabilidad de seguir en la industria musical. ¿Qué te motiva a perseverar y continuar creando música a pesar de los obstáculos que puedas encontrar en el camino?

R- Muy buena pregunta de verdad, creo que lo sigo haciendo porque no sabría que hacer si no es eso, un par de veces cuando me he visto sumergido en dudas existenciales mi madre me ha preguntado “Que harías si no es música?” Y esa pregunta ya es una respuesta. También aporta mucho el estar rodeado de personas talentosas que le ponen la misma pasión y entrega a la música y el arte, en este último año ha estado involucrada Marta Holly (mi pareja) en algunos de los procesos creativos y gestión de la banda, y encuentro esto bastante divertido, nutritivo y esperanzador.

Tengo otras maneras de transitar este caos organizado que es la vida a parte de la música como estar con mi gente, surfear, viajar y pasear, pero que haría mientras todo el mundo se tira 8 hora trabajando, pues me pillarás haciendo lo que más me gusta hacer, tocar el saxo, la flauta, produciendo, cantando, componiendo o rebuscando tesoros para vestir en las obras sociales.

Fotografías cedidas por Nala Rami